Hace aproximadamente un año, me decidí a volver a compartir mis pensamientos por medio de letras en este mundo digital llamado internet. Como anteriormente lo he mencionado, he creado blogs en algún momento o colgado mis llamados poemas en alguna página destinada a ellos, sin embargo, tarde o temprano terminaba por borrarlos. Esta vez dudo suceda algo similar. Aunque no escriba tan seguido como quisiera por aquí, ya no quiero borrar mi huella digital. La pandemia ha sido algo sumamente importante a nivel mundial, dudo mucho que exista alguien que considere no se vio afectada por ella de algún modo. Y deseo este blog me recuerde tal suceso y lo que a veces se me olvida: el poder de las letras me serán siempre dirección y salvavidas. 

Comencé este blog precisamente en medio de una crisis personal, por consecuencia también del encierro y del miedo a un virus desconocido. Tiempo después la pandemia no ha cesado, pero por fortuna el lugar seguro también persiste, donde expreso lo que se me viene a la mente, de una manera más extensa que un tweet o una imagen en Instagram. La vastedad de las letras o su exigüidad, me han tomado de la mano y se sientan a llorar a mi lado, si es el caso, o ríen conmigo si la ocasión lo permite. Me recuerdan lo efímero de la vida y la felicidad que se puede sentir en ella. Me llevan del cielo al infierno y viceversa, en cuestión de minutos, o de días.

Esta entrada es para agradecerles a quienes se toman el tiempo de leerme y compartirme su punto de vista, a quienes a pesar de tener tanto por leer (que son la mayoría de ustedes 👀, ¡las admiro tanto!) y que tienen también sus respectivas vidas y ocupaciones, comparten un momento asíncrono conmigo sin distinciones de banderas más que la combinaciones de colores entre ellas.

Gracias una vez más y espero seguir nutriéndome de ustedes como hasta ahora, de lo que comparten, de lo que leen, de sus reseñas, lengua,  modismos, opiniones y formas de ver la vida. Ha sido un gusto compartir letras con ustedes 😊. Y si alguien me ha leído desde el anonimato, también te agradezco por el tiempo y la oportunidad de expresarte a ti también lo que veo, siento y pienso; ojalá algún día puedas compartir conmigo también lo que tengas que expresar 😁.

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